Hipólito Mejia: un candidato con los pies de barro

Por Jesús Belén

Érase una vez, un extraño personaje de la historieta juvenil boricua, Catilanguá Lantemué, una mujer de barro que quiso atrapar a un cangrejo que había revelado su verdadera identidad, el cangrejo que sabia de las debilidades de la señora corrió hacia el río y echó a nadar, su persecutora olvidándose de su composición arcillosa siguió tras él y se desbarato en el agua intentando lograr su objetivo. Este es el caso de Hipólito Mejía.

El candidato del PRD, Hipólito Mejía, por condiciones muy particulares de su partido y, junto a eso, las torpezas cometidas por su contendor, Miguel Vargas Maldonado, logró ganar la convención blanca sobre un 54%. Este acontecimiento lo hace creer que la sociedad dominicana tiene los mismos propósitos y es de mentalidad parecida a su PRD.

Para el 2012 el PRD tendrá ocho años fuera del poder. Estas razones de por sí hacen que las bases perredeístas procuren masivamente que el hombre que los puso a comer del 2000 al 2004, Hipólito Mejía, los reinserte de nuevo en los puestos públicos para saciar su sed de poder. Esto es lógico y hasta comprensible de su parte.

Ahora bien, una vez se es candidato y se tiene asegurada la militancia de tu partido (en estas circunstancias una parte) a sabiendas de que nadie gana unas elecciones nacionales solo con sus partidarios, entonces tienes que salir a buscar el voto fuera de tu organización política y justamente donde esas gentes que ayer les dijiste “si la calle está dura súbete a la acera”, “pon un huevo para ver si es bueno” y mil cosas más.

Para Hipólito volver a ser presidente (cruzar el río) tendría que buscar los votos donde los familiares de los miles de ingenieros, pequeños y medianos empresarios quebrados y hasta suicidados por las quiebras en que los sometiste en tu desgobierno. Donde los banqueros y empresarios que debían cambiar los precios día por día por tu inestabilidad financiera.

Buscar los votos donde las amas de casas y chóferes que debieron hacer largas filas para poder comprar tres galones de GLP o gasolina. Buscar los votos donde esos funcionarios que humillaste cuando en cada inauguración les cortabas las corbatas frente a las cámaras, les tiraba tierra en sus lustrados zapatos y les roseabas el caño de agua al inaugurar un acueducto.

Conseguir los votos donde aquellos dominicanos que tantas veces defraudaste haciendo el ridículo en foros internacionales donde lograste que te confundieran la “P” de Presidente con la “P” de Payaso. Tienes que buscar los votos, allí mismo, donde quemaste miles de tareas de arroz para favorecer intereses particulares. Entonces señor Hipólito, ahí es que la puerca retuerce el rabo.

Justamente este es el río que tiene que cruzar el ex presidente Hipólito Mejía para retornar al poder en agosto del 2012, pero resulta que su desastrosa gestión de gobierno lo hacen un candidato vulnerable y con los pies de barro que le hace imposible alcanzar sus planes funestos contra la estabilidad y el progreso que experimenta el país con los gobiernos del PLD.